la de la nevera,
muy vitaminada
leche de primera,
se quiere casar
con hombre moreno,
de enorme prestigio
y de olor muy bueno.
Ha puesto un anuncio
dentro del mercado
buscando ese novio
que tanto ha soñado.
La llamaron muchos
buenos pretendientes
y, a ninguno quiso,
la muy exigente.
Vino en la mañana
el novio añorado,
un chico moreno,
negrito, tostado.
Los dos se casaron
dentro de un tazón
y café con leche
es la invitación.
Se vino a la boda
el pan orgulloso,
jugo de naranja
y un huevo curioso.
Se vistió de crema
Doña Mantequilla
y la mermelada
llevó su sombrilla.
Y en esta boda
de café con leche
se fueron juntando
todos, uno a uno,
en esa bandeja
de mi desayuno.
Zandra Montañés Carreño
Risueñas letras, jeje
ResponderEliminarmuy bueno, saludos