Los
fines de semana acaban por ser mucho más cortos de lo previsto, por
incapacidad de la grande mayoría de las personas “desligar” de los compromisos
de trabajo, revela una pesquisa británica.
Ya
había llegado al Café y así que me senté hice mi pedido y seguí leyendo porque
trata de un asunto importante.
Estaba
tan atenta que no me di cuenta de quién había llegado cerca de mí, dos amigas
que ya no veía hace mucho.
Me
encantó verlas y así ya no estaba sola para tomar el café y para comentar lo que estaba
leyendo en el periódico.
La
noticia que estaba leyendo me hizo recordar mi último empleo. En los últimos tiempos
casi ni daba tiempo para tomar un café. El trabajo estaba siempre cayendo en mi
mesa de trabajo. Yo tenía compañeras que por veces tenían que
trabajar al sábado y no les pagaban más por eso. A veces aun eran maltratadas.
Como
ahora hay mucha gente en paro aún es peor porque exigen mucho más. Cuando
tienen mucho trabajo, en vez de llamar personal eventual, ponen los empleados a
trabajar más horas y dicen “Quien quiere trabajar se queda, quien no quiere se
puede marchar, hay mucho quien quiera.”
Muchas
personas están siendo víctimas de “mobbing”,
agresión psicológica en el trabajo.
El estudio
hecho junto de 4000 trabajadores concluyó que seis en diez empleados interrumpen
el fin de semana para realizar alguna tarea relacionada con su ocupación, como
leer los emails o mismo alguna labor. Un cuarto de los inquiridos reveló que
tenía este comportamiento, en consecuencia de presiones por parte del jefe o
porque los compañeros también lo hacían.
Para
la mayoría de las personas dijo que el fin de semana no tiene inicio en los
viernes por la noche porque solo a partir de las 12.38h de sábado consiguen”desligar” del ritmo del trabajo.
Hechas
las cuentas, acaban por aprovechar solo 27 horas y 17 minutos durante el sábado y del domingo, menos de
mitad del tiempo en que están fuera del empleo.
Mitad
de las personas que contestaron a la pesquisa británica afirmaran que el
trabajo acaba por perjudicar el tiempo pasado en familia y más de la mitad han
afirmado que las tareas domesticas les dejaban demasiado cansados para
aprovechar el fin de semana de manera más relajada.
“El
Hombre del Café” llegó un poco tarde y lo invité para sentarse en mi mesa y le
conté resumidamente de lo que estábamos hablando.
Es triste, pero es la cruel realidad. Las personas se convierten en rehenes de sus empleadores. Viven con la "espada de Damocles" del despido, con la angustia de no saber cuándo pueden ser despedidos.
ResponderEliminarAbrazos
Rorry
El trabajo, que debiera ser un derecho, es un bien muy preciado y escaso en estos tiempos. Algunos empresarios desaprensivos lo utilizan como arma para explotar a sus empleados.
ResponderEliminarUna pena.
Besos.
Ahora mismo quien tiene un trabajo es como si le hubiera tocado una loteria. Siempre somos los de abajo los que recibimos todos los golpes.
ResponderEliminarAmiga Flor, por siempre nos hemos creido que nuestro patrón es nuestro enemigo; jamás hemos pensado que si no fuera él no podriamos vivir; tampoco se nos ha ocurrido pensar que nadie sufre más que un empresario. Él tiene que buscar sus benefiios y los nuestros; seguramente ellos saben ahorrar mejor que nosotros, pero no nos hemos ocupado de aprender a hacerlo.
ResponderEliminarPuedo asegurarles que empece a trabajar con doce años en una farmacia. Estudié mientras trabajaba; a los 22 años ya hbía teminado mi carrera de Practicante en Medicina y Cirugia. Seguí trabajando por cuenta ajena en La Seguridad Social hasta los 65 años ue me jubilé; y puedo asgurarles que las empresas necesitan de nuestros servicios y que no existirian sin nuestra ayuda.
Dejemos de pensar ue TODAS las empresas son nuestros enemigos, porque muhos de nosotros no merecemos el esfuerzo que ellas hacen por nosotros manteniendo nuestros puestos de trabajo.
Un abrazo.
Jecego.
Hola Flor!
ResponderEliminarGran entrada.
Saludos,
Ricard
Deberíamos de saber desconectar los fines de semana de todo lo que huela al trabajo rutinario que desempeñamos durante toda la semana, si no el stress, irá en aumento y nuestra calidad de vida se verá más y más perjudicada; no le damos al ocio la importancia que tiene para nuestra salud física y psíquica, sin olvidar los beneficios que tiene para nuestra vida familiar.
ResponderEliminarUn besito Flor
Hola, Flor, si no desconectamos va en perjuicio de la calidad de vida.
ResponderEliminarEn cuanto a ls presiones en el trabajo y el mobbing, sí que están muy extendidos. Esto hace que se crean conflictos psicológicos en las personas.
Un abrazo.
Juan Antonio