El Café hoy estaba cerrado por ser festivo y yo aproveché el día para quedarme en casa para descansar poner algunas lecturas al día, hacer una torta y otras cositas más.
Mientras estaba leyendo las noticias me despertó el interés de un artículo
en la página cultural “Marmita en el museo”.
De seguida pensé que alguien había dejado una maleta sospechosa con
todos los contornos ya habituales en casos así.
Empecé a leer la noticia y no era nada de lo que yo estaba pensando,
menos mal. Todos los días hay noticias de violencia por todos los lados.
La directora de la Casa-Museu Medeiros e Almeida en Lisboa invita a
quien quiera visitar el museo a la hora del almuerzo y llevar su comida lo
pueden hacer. Mirar una pieza de arte con un bocadillo en la mano y seguir comiéndolo
no hace ruido, no incomoda. No es lo mismo que comer palomitas en el cine como pasó con un espectador que fue
asesinado durante una sesión de la película Cisne Negro en Letonia.
La iniciativa se llama “Almuerzo con arte” y tiene como objetivo
rentabilizar esa hora libre del día.
La directora del museo se inspiró en una iniciativa da National
Gallery en Londres para estas visitas rápidas.
El 26 de Agosto termina el periodo del experimento, con entrada
gratuita de lunes a viernes siempre a las 13.30h.
Los “Almuerzos con Arte” recorren 26 piezas entre ellas el servicio de té de Napoleón Bonaparte, un cuadro de Brueghel y el reloj de Sissi de Austria. Está considerada una de las más valiosas colecciones de artes decorativas del país.
Si mi abuelita fuera viva no le haría mucha gracia esta noticia. No
nos dejaba comer nada en la calle y mucho menos en un museo. Decía que era una
falta de educación.
Estoy segura que la directora tiene presupuesto para pagar a un equipo
de limpieza para entrar cuando el “Almuerzo del Arte” termine. Y por favor que
no se olvide de poner un recipiente para la basura : latas y botellas vacías,
servilletas, restos de pan…
Yo en estos asuntos soy muy
conservadora. Hay sitios para todo, para trabajar, para comer, para dormir,
para divertirse… pero como hoy en día ya se ve de todo, como dijo un personaje
del deporte, “desde que vio un cochino andar de bicicleta ya cree en todo”.
Quién sabe si un día me quito este mal humor y invito a mis amig@s a tomar un té con las tazas de porcelana de
Napoleón????
Seguro que l@s estaré esperando mirando las horas en el reloj de la Emperatriz Sissi.
no es mala idea, pero cada cosa en su sitio, al Mueso hay que ir comida y si puede ser meado, Imagínate un bocadillo de estos grasientops chorreando aceite por el suelo...me da repelús sólo de pensarlo.
ResponderEliminarEL HOMBRE DEL CAFÉ
Interesante nota y sugerencia...
ResponderEliminarSaludos para vos