Siempre fue así en lo que respecta las vacaciones. Cuando uno
regresa se siente tan cansado que tiene
que darse a si mismo unas horas de descanso.
Yo aproveché para terminar de leer mi libro, leer los correos,
arreglar un poco la casa y como no lo había hecho antes de salir lo hice esta
tarde, limpiar la nevera para volver a llenarla, bueno, más o menos. Mejor no exagerar en las compras
porque la cuenta del banco está casi a
rojo.
Resolví no salir hoy. Mañana pasaré por el Café para ver a mis amigas,
al “Hombre del Café” e iré al mercado comprar muchas, muchas verduras, frutas y
pescado.
Estaba leyendo una revista francesa de cocina y saqué algunas recetas
de tortas hechas en el micro-ondas. Tenía intención de hacer una torta de
chocolate pero cuando me desperté después de una pequeña siesta, la intención pasó a
negación y la dejé para mañana.
Miraba por la ventana y llovía. Ya decía mi padre, 1º de Agosto, 1º de
invierno.
Celebro que hayas regresado de vacaciones. Tenia razón tu padre, al menos en elcaso de este raro verano.
ResponderEliminarEL HOMBRE DEL CAFÉ
Este verano es un poco raro. Espero que lo habrás pasado bien.
ResponderEliminarUn abrazo